ahora sí

si camino en circulos, dónde llego? si me doy vueltas y mi sangre cae por mi nariz, quién soy? cómo puedo caminar si mis bolsillos están rotos? si todo está explotando en la ciudad, qué ciudad preguntas, te digo que sí, que los relatos son de sangre, son de día, de luz, de música, que las cosas son peligrosas, pero no lo creo, no me gusta pensarlo, me gusta hacerlo, pero las cosas se presienten, se saben, y yo no las sé, y ya no es hoy, ahora dónde están esas cosas? dónde están las cajas debajo de mi cama, y las brisas que guardé cuando estuve cerca del mar ? no me respondo a mi mismo, no se puede, se puede salir a caminar, cerrar la puerta y entrar y salir, se puede andar por colores, se puede caminar por sonidos, por reflejos, por los techos, así, sólo así se puede andar cuando todo anda, cuando todo se anda moviendo acá adentro, dentro de esta caja negra, y mientras más se mueve todo acá adentro más me muevo yo, aunque el movimiento sea como vidrio quebrado en el puño de la mano izquierda. a pesar de los peces, a pesar de los quebrantos, a pesar de la sal, se puede andar por acá, a pesar de todo, y gracias a todo, se puede caminar por una calle cualquiera y no pensar en lo que hay al doblar la esquina y si no pongo punto es porque estas cosas no se cierran como cerrar una carta